¿Por qué lo Seguiste?
A lo largo de los años, las personas, a menudo, me han preguntado: ¿Cómo supiste que habías sido llamado al ministerio? No tuve una zarza ardiente como Moisés, ni una visión celestial como Isaías. No escuché la voz del Señor resonando desde el Cielo, “¿A quién enviaré?” No escuché las palabras en voz alta. No. […]